No sé qué escribirte, ni si quiera sé... Qué decirte.
No sé qué hacer si me duermo sin ti, ni sé desenredarme el pelo por las mañanas cuando me despierto, y no te veo...
El espejo no refleja nada, porque nada me siento.
Yo... Tenía la intención de escribirte un poema,
de amor, o descafeinado.
De "vuelve", pero no.
Ya he tirado por la borda toda la métrica,
y el ritmo, y las estrofas, y los estribillos,
perdí el rumbo y el norte,
desde que me desencadenaste de tus tobillos...
Digo.
Estoy cansada de no hacerte el amor, y de pelearme con las paredes,
que aprietan y aplastan,
como los libros, como las cartas que se me acumulan por no enviarte,
como el Sol cuando me ciega, y me recuerda cómo era cuando solía mirarte.
Aprietan las camisas, y las ventanas por las que no me tiro,
recuerdo cuando me preguntaban dónde estabas,
y yo decía,
que en el último piso,
que yo no estaba a tu altura,
y creo también,
que desde ahí tengo vértigo.
Vértigo a no poder estar contigo,
vértigo a las noches sintigo,
sólo conmigo, y con tu vacío, que me hace de abrigo,
cuando me muero de frío.
Porque no hay nexo copulativo que nos una,
pero tampoco disyunción ninguna,
y me entra el miedo cuando pienso que podemos llegar a ser,
dos puntos seguidos, perdidos en el infinito de todos los textos,
que te escribí mientras dormías,
y mientras no estabas y no me dejabas dormir,
aún asi,
y que aún nos queda encontrar el último, y el definitivo...
Vértigo y miedo al pensar, que ese punto...
Es el lunar de tu cuello, o el de mi dedo pequeño,
vértigo y miedo, al pensar que somos el final,
de todo lo que no fuimos, y de todo lo que no seremos,
ni tú conmigo, ni yo contigo,
Vértigo y miedo al pensar...
Que tú serás todo lo que yo quise contigo, pero sinmigo,
y que yo seré todo lo que tú necesitabas, pero sin ti,
porque lo seré yo sola, conmigo.
No sé qué hacer si me duermo sin ti, ni sé desenredarme el pelo por las mañanas cuando me despierto, y no te veo...
El espejo no refleja nada, porque nada me siento.
Yo... Tenía la intención de escribirte un poema,
de amor, o descafeinado.
De "vuelve", pero no.
Ya he tirado por la borda toda la métrica,
y el ritmo, y las estrofas, y los estribillos,
perdí el rumbo y el norte,
desde que me desencadenaste de tus tobillos...
Digo.
Estoy cansada de no hacerte el amor, y de pelearme con las paredes,
que aprietan y aplastan,
como los libros, como las cartas que se me acumulan por no enviarte,
como el Sol cuando me ciega, y me recuerda cómo era cuando solía mirarte.
Aprietan las camisas, y las ventanas por las que no me tiro,
recuerdo cuando me preguntaban dónde estabas,
y yo decía,
que en el último piso,
que yo no estaba a tu altura,
y creo también,
que desde ahí tengo vértigo.
Vértigo a no poder estar contigo,
vértigo a las noches sintigo,
sólo conmigo, y con tu vacío, que me hace de abrigo,
cuando me muero de frío.
Porque no hay nexo copulativo que nos una,
pero tampoco disyunción ninguna,
y me entra el miedo cuando pienso que podemos llegar a ser,
dos puntos seguidos, perdidos en el infinito de todos los textos,
que te escribí mientras dormías,
y mientras no estabas y no me dejabas dormir,
aún asi,
y que aún nos queda encontrar el último, y el definitivo...
Vértigo y miedo al pensar, que ese punto...
Es el lunar de tu cuello, o el de mi dedo pequeño,
vértigo y miedo, al pensar que somos el final,
de todo lo que no fuimos, y de todo lo que no seremos,
ni tú conmigo, ni yo contigo,
Vértigo y miedo al pensar...
Que tú serás todo lo que yo quise contigo, pero sinmigo,
y que yo seré todo lo que tú necesitabas, pero sin ti,
porque lo seré yo sola, conmigo.